LAS GLORIOSAS CENIZAS

Creo que una de las sensaciones más emotivas que uno experimenta cuando esta un grupo de amigos de futbol, es organizarse para la compra de camisetas para el equipo, y valla que de estas tengo para contar.

Ilusión, Emoción, impaciencia, y cuantos adjetivos mas podría decir, lo que generaba y genera cada vez que realizábamos la iniciativa para comprarlas, imagínense, recién fundado el equipo, había que elegir los colores, el diseño, el lugar, y lo más importante el dinero, .

Cuantas gestiones que realizamos para conseguir camisetas, siempre pensando en ser diferentes a los demás equipos del barrio, la mayoría no tenía nada, pero nosotros ya en ese entonces éramos adelantados y muy organizados, en realidad nos dábamos mañas para conseguir hasta lo imposible, además la colaboración de todos era asombrosa, por que siempre surgía una idea, algo para hacer, o simplemente para divertirnos en nuestras tardes después del cole, y todos apoyábamos, sin dudarlo en estos mas 40 años que tengo noción o que recuerde, hay muchas cosas para contar y comencemos con la primera la del León.

Todo era adrenalina para este nuevo emprendimiento, que era haber fundado un equipo para jugar en liga, ya no era más jugar contra el equipo de la otra cuadra, cruzarse con Pache, en el almacén de Carmona y hacerle partido, primero en la cancha de ellos y luego en la nuestra, o contra el equipo de Tiago, Marcelo iba al mismo grado de la 23 entonces hacia el partido, y nos encontrábamos en la cancha que estaba en la esquina de Cuyo y Cno. de cintura, la de los Polacos, que casi siempre terminaba cuando la pelota era reventada por un camión en la ruta, pero esto es para otro capítulo, pero del libro Your presidente, el provocador.

Pero retomando el hilo del texto, de esos partidos de infancia, pasábamos a jugar liga contra otros equipos, otros barrios, otras camisetas, así que la nuestra debía ser diferente, teníamos pensado colores, el diseño, pero finalmente, fue al libre albedrío.

Recuerdo que fuimos a Lanús, la fábrica de camisetas se llamaba, Urribarri, famosísima en la época porque hacia principalmente camisetas de rugby, pero Chiche tenía el dato y fuimos con Marce y Tiago, una fabrica como tantas, galpón, mostrador, estanterías plagadas de camisetas embolsadas,… preguntamos por un juego de camisetas y el vendedor nos consulta si queríamos dejar el pedido o si queríamos ver unas que ya estaba hechas que no fueron retiradas y estaban a la venta.

Había 3 juegos, uno rojo como el de independiente, otro azul y negro como las del inter pero con los bastones finitos y por último el vendedor nos muestra una camisetas Grises con cuello y puño rojo, enseguida me puse a pensar que no había ningún equipo en el mundo que su camiseta titular sea Gris con esos vivos rojos, entonces nos pusimos a votar, si nos quedábamos con la grises o con las del inter, y bueno ya saben el final de esta anécdota, nos llevamos las grises, y de este modo como magia del azar nacieron los colores del Ceniza, como lo bautizo el Colo, con tema de cancha y todo, hasta que unos años posteriores tomara su apodo actual de El León de Luis Guillon.